En el cuidado del hogar, limpiar un espacio que suele acumular gérmenes puede ser una labor agotadora. Descubre la manera de mantener tus baños limpios y perfumados por un largo tiempo.
El moho, la suciedad, los olores desagradables y la cal son factores que pueden afectar el aroma de tus inodoros. Más allá de descalcificar o usar productos costosos de limpieza, hay un consejo muy útil que te permitirá mantener tus inodoros impecables durante mucho tiempo.
¿Cuál es el truco para lograr baños limpios y perfumados?
Ya sea en la taza del inodoro o en el lavabo, en ocasiones es necesario recurrir a ambientadores para restaurar la frescura de este espacio. Sin embargo, para eliminar los olores desagradables, no siempre es preciso utilizar un desinfectante industrial. Un método de tipo System D te ayudará a desinfectar la superficie y dejarla en perfectas condiciones. Los productos ecológicos con alta eficacia te permitirán tener inodoros libres de cal y olores molestos. ¡Solo necesitas seguir las indicaciones!
Para neutralizar los olores del inodoro, necesitarás unas gotas de aceite esencial de mandarina, un cítrico que aportará un aroma suave a tus inodoros. Tras limpiar y desinfectar la taza, prepara un recipiente con agua caliente y añade 12 gotas de aceite esencial de cítricos antes de mezclar. Luego, empapa un paño de microfibra en esta solución y escúrrelo. Limpia tanto el interior como el exterior de la taza y repite el proceso tantas veces como sea necesario. Solo debes secarlo con un paño seco. ¡Los resultados serán sorprendentes!
El aceite esencial de mandarina es uno de los productos naturales ideales para desinfectar y perfumar baños – Fuente: spm
Existen otros hábitos para eliminar los olores desagradables del inodoro.
Los inodoros pueden ensuciarse rápidamente y emitir olores desagradables. Además del truco del aceite esencial de mandarina, hay otros hábitos que pueden ayudarte a mantener baños limpios y fragantes.
Limpiar los baños – Fuente: spm
1- Limpiar el inodoro frecuentemente
Parece evidente, pero limpiar el inodoro de manera regular es la mejor forma de evitar malos olores y asegurar una limpieza y frescura duraderas. Durante la limpieza a fondo, asegúrate de lavar la alfombrilla del baño y las toallas, así como el suelo de este espacio húmedo.
2- Utiliza un difusor de aceites esenciales para desodorizar los inodoros
Para unos baños frescos, considera invertir en un difusor de aceites esenciales, un dispositivo que libera tus aromas preferidos a través del vapor. Perfuma este espacio de manera continua y enmascara los olores desagradables. Puedes elegir lavanda por sus propiedades relajantes o limón por su efecto energizante.
Aceites esenciales, un recurso para desodorizar inodoros – Fuente: spm
3- Usa popurrí para aromatizar los baños
Si bien un difusor de aceites esenciales es una buena opción para eliminar los olores del inodoro, el popurrí es una alternativa más natural que te permitirá disfrutar de un agradable aroma floral. Para hacerlo tú mismo, utiliza pétalos de flores secas a los que puedes rociar el perfume de tu elección. Llena un saquito de tul con flores aromáticas. Este objeto no solo decorará el espacio, sino que también perfumará suavemente tus sanitarios sin necesidad de ambientador. Cámbialo cada tres meses para mantener su efectividad.
4- Combate la humedad de las toallas en los baños
Además de permitir que un desodorante natural actúe en tu inodoro, asegúrate de que tus toallas estén secas y limpias. Y por una buena razón, cuando están dobladas o húmedas, pueden generar un olor a moho o humedad. Para secarlas, es recomendable colgarlas en un toallero o dejarlas al aire libre. ¡También es aconsejable lavarlas una vez por semana para una higiene óptima!
Las toallas de baño pueden causar olores desagradables – Fuente: spm
Como puedes ver, para tener inodoros limpios y perfumados, no es necesario recurrir a métodos complicados. Este consejo del aceite esencial de mandarina te ayudará a disfrutar de aromas agradables. Otros hábitos preventivos te permitirán mantener esa frescura de manera duradera sin necesidad de ambientador. ¡Es casi mágico, ¿verdad?