Por estas razones, el baño se ensucia con facilidad y resulta complicado eliminar toda la suciedad acumulada en sus superficies de un solo movimiento.
Es importante mencionar que, en el baño, las mujeres suelen aplicarse maquillaje, lo que puede dejar residuos de cosméticos en polvo o fragancias, además de restos de pasta dental y marcas de suciedad.
Por otro lado, los hombres tienden a afeitarse o recortarse la barba, por lo que el vello puede caer en el lavabo y ocultarse en los rincones más difíciles de alcanzar, así como pelos de otras zonas como las piernas, la nariz y las orejas.
Por esta razón, es fundamental mantener nuestro baño limpio, ya que debe ser un espacio que se limpie frecuentemente debido a su uso personal.
Pasos a seguir
Existen numerosos productos en el mercado diseñados para eliminar gérmenes y bacterias, aunque a veces pueden resultar costosos y no tan efectivos como algunos remedios naturales.
Uno de estos métodos, por ejemplo, es comúnmente utilizado en hoteles y deja esa fragancia a limpieza que sentimos al entrar en una habitación de hotel durante nuestros viajes, especialmente en los baños.
Para lograr que tus sanitarios brillen y estén impecables, simplemente utiliza bicarbonato de sodio, espolvoreándolo en el lavabo y el inodoro, luego rocía un poco de vinagre blanco y limpia todo con agua caliente utilizando un paño de microfibra o una esponja.
Los hoteles de lujo, por ejemplo, suelen después de limpiar los sanitarios con este método, aplicar aceite de bebé con un bastoncillo de algodón empapado en él, limpiando las superficies con este.
Así, el baño quedará muy limpio y brillante, y disfrutaremos de un aroma que nos hará olvidar que estamos en una de las áreas más frecuentadas y que se ensucia más rápidamente en nuestros hogares.