Es una realidad ineludible. Cocinar diariamente inevitablemente resulta en manchas en tu estufa de gas, ya sea por restos de comida o grasa quemada. Por eso, es crucial limpiar tu estufa a diario, con especial atención a los quemadores de gas, ya que si se obstruyen, pueden perder eficacia al calentar. Por lo tanto, el cuidado de tu aparato es esencial, y aquí te compartimos dos consejos sencillos utilizando productos naturales.
Los quemadores de gas sucios son un desafío común para quienes cocinan frecuentemente. Aunque puedan parecer complicados de limpiar, la tarea no es tan ardua como parece siempre que se realice una limpieza regular. A continuación, te presentamos algunos consejos para una limpieza rápida, fácil y, sobre todo, efectiva.
Esponja para estufa de gas – Fuente: spm
Dos recomendaciones para limpiar los quemadores de gas
Jabón de Marsella – Fuente: spm
1. Jabón de Marsella
Para este método, necesitarás:
- 2 litros de agua
- Un cepillo de dientes viejo con cerdas suaves.
- Un recipiente grande
- Jabón de Marsella
- Vinagre blanco
El jabón de Marsella es un excelente limpiador que puede eliminar manchas difíciles en tu estufa de gas, además de ser útil para el hogar y para limpiar suelos. Esta combinación con vinagre blanco hará que tus quemadores de gas brillen.
¿Cómo proceder?
Para aprovechar al máximo las propiedades del jabón de Marsella, puedes rallarlo para obtener copos. Luego, hierve una olla de agua para disolver el jabón. Una vez que tengas una mezcla homogénea, viértela en un recipiente y añade el vinagre blanco.
Una vez que la mezcla esté lista, solo necesitas sumergir los quemadores de la estufa en el recipiente y dejar que la solución actúe durante 30 minutos. Luego, frota las manchas difíciles con el cepillo de dientes viejo y deja que los quemadores se empapen durante otros 5 minutos. Finalmente, enjuaga los quemadores con agua limpia y sécalos con un paño limpio.
Dado que es fundamental llevar a cabo un mantenimiento regular de tu dispositivo, deberías limpiarlo una vez a la semana. Si tus quemadores de gas están especialmente sucios, puedes probar la siguiente solución que combina vinagre blanco y bicarbonato de sodio.
Vinagre y bicarbonato de sodio – Fuente: spm
2. Vinagre blanco y bicarbonato de sodio para quemadores de gas muy sucios
El vinagre blanco y el bicarbonato de sodio son conocidos como productos de limpieza esenciales en el hogar. Para eliminar manchas persistentes, el bicarbonato actúa como un astringente y antibacteriano que ayuda a desobstruir la suciedad.
Para esto necesitarás:
- Vinagre blanco
- Bicarbonato de sodio
- 2 litros de agua
- Una esponja
Para limpiar estufas muy sucias con estos ingredientes , hierve el agua y añade una cucharada de bicarbonato de sodio y vinagre blanco. Vierte la mezcla en un recipiente con agua, sumerge los quemadores de gas sucios y déjalos en remojo durante aproximadamente 2 horas, o incluso toda la noche si es posible. Solo debes retirar los quemadores del recipiente antes de limpiarlos con una esponja, asegurándote de frotarlos bien antes de secarlos.
¿Cómo limpio los otros componentes de la estufa de gas?
Para los quemadores de gas, puedes aplicar el mismo método a las placas, perillas y rejillas como parte de la limpieza habitual.
Las placas:
Mezcla un poco de bicarbonato de sodio con agua caliente, luego empapa una esponja y pásala sobre la placa sucia. El vinagre blanco será efectivo si las salpicaduras de grasa y restos han dejado manchas incrustadas en el esmalte. Después de aplicar el vinagre, enjuaga con agua caliente y seca las placas con un paño de microfibra.
Las perillas:
Aunque las perillas estén alejadas de las proyecciones de alimentos o líquidos, no son inmunes a las manchas. En este caso, solo necesitarás un poco de lavavajillas aplicado con una esponja húmeda para frotar las perillas. El lavavajillas es conocido por su capacidad para eliminar residuos, además de tener muchos otros usos prácticos que puedes consultar aquí en otros 12 sorprendentes usos del lavavajillas.
Las rejillas:
En el mantenimiento diario, simplemente sumerge las rejillas en el lavavajillas junto con otros utensilios de cocina. Para el mantenimiento mensual, puedes remojar las rejillas en un recipiente con vinagre blanco.