Los trapos de cocina son indispensables en cualquier cocina. Frecuentemente, se utilizan para secar los platos, limpiar superficies o secarse las manos durante la preparación de alimentos. Para acelerar su secado, es común colgarlos en la puerta del horno. ¿Es esta práctica recomendable o no? Aquí te lo explicamos.
Utilizar un trapo limpio para secar los platos y luego colocarlo en la puerta del horno para que se seque más rápidamente parece una acción conveniente y sin riesgos. Sin embargo, esta decisión no es tan sensata y podría acarrear ciertos peligros.
Razones para evitar colgar un trapo de cocina en la puerta del horno
Si tienes la costumbre de colgar un trapo de cocina en la puerta del horno, ¡debes dejar de hacerlo inmediatamente! Este hábito es todo menos higiénico y puede representar riesgos para tu salud y la de quienes te rodean.
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El trapo de cocina en la puerta del horno, una práctica poco higiénica
Trapos de cocina en la puerta de un horno. fuente: spm
En la cocina, existen diferentes tipos de trapos. Algunos son utilizados para secar los platos, mientras que otros sirven para limpiar la mesa o secarse las manos durante la cocción. Estos diversos usos ayudan a controlar la proliferación de bacterias, con el fin de prevenir cualquier riesgo de intoxicación alimentaria. Al igual que la puerta del refrigerador y otros aparatos, la puerta del horno también puede ser un ambiente propicio para las bacterias. Antes de abrir la puerta del horno, muy pocas personas se lavan las manos. Por lo tanto, colocar un trapo que se usa para secar platos o limpiarse las manos en la puerta de este electrodoméstico no es recomendable. ¡Es principalmente una cuestión de higiene y limpieza!
Sugerencias para mantener los trapos de cocina limpios y libres de bacterias
La mayoría de las bacterias se desarrollan en condiciones cálidas y húmedas. Esto es especialmente cierto para los trapos de cocina, que a menudo cuelgan de la puerta del horno o cerca del fregadero. Por ello, es crucial adoptar los hábitos adecuados para que se mantengan limpios y sin bacterias.
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Lava los trapos de cocina en la lavadora a alta temperatura.
Ajustes de la lavadora. fuente: spm
Un simple lavado puede no ser suficiente para eliminar las bacterias de los trapos de cocina. Además, las manchas de grasa que se acumulan pueden ser difíciles de eliminar. Lo más recomendable es lavarlos en la lavadora a 90°C. No dudes en añadir bicarbonato de sodio a tu detergente habitual para obtener mejores resultados. Además de suavizar la ropa, también tiene propiedades de limpieza y blanqueo.
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Remoja los trapos de cocina en una mezcla de agua y cristales de soda.
Para asegurar que tus trapos de cocina queden completamente limpios, puedes sumergirlos en un recipiente con agua caliente y añadir cristales de soda. Déjalos reposar durante una hora antes de lavarlos en la lavadora con un ciclo normal. Luego, sécalos al aire o, idealmente, al sol. Los cristales de soda ayudan a suavizar y desinfectar la ropa de forma natural.
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Almacena los trapos de cocina en lugares adecuados
Trapos de cocina colgados del tirador del armario. fuente: spm
Existen diversas soluciones para almacenar los trapos de cocina. Una opción es utilizar un soporte de pared cerca de la ventana de la cocina. Esto ayuda a mantenerlos alejados de áreas húmedas. Además, es una solución de secado rápida y efectiva. Sin embargo, asegúrate de que la pared sea resistente a la humedad. Otra opción es colgarlos en portapaños que se pueden colocar en el interior de las puertas del armario para trapos limpios, y en el exterior para los trapos mojados y usados.
Como has podido deducir, un trapo utilizado para secar los platos no debería colocarse en la puerta del horno. Esta práctica poco higiénica debe evitarse para reducir el riesgo de proliferación de bacterias.