Duplica tu cosecha de frutas y verduras con este ingrediente de la nevera

Recientemente, ha cobrado mayor relevancia el consumo de frutas y verduras de km 0, lo que implica adquirir productos que no han viajado largas distancias y que pueden ser consumidos de inmediato.

Por esta razón, se alienta a los consumidores a elegir productos que pasan directamente de los campos del agricultor a la mesa, minimizando los intermediarios y el riesgo de contaminación.

Esto es fundamental y se promueve a través de Coldiretti para que los ciudadanos italianos tengan acceso a productos auténticos y, frecuentemente, en diferentes áreas de la ciudad, se pueden ver puestos amarillos que ofrecen frutas y verduras de alta calidad.

La calidad de las frutas y verduras y su sabor también dependen del tipo de suelo en el que se cultivan y de los cuidados que se les brinden, evitando el uso de pesticidas y sustancias perjudiciales para la salud del consumidor.

Por esta razón, ha surgido una tendencia hacia el consumo de productos ecológicos o libres de transgénicos, especialmente cuando se trata de la alimentación de los más pequeños; tanto es así que hace algunos años se implementó un programa de frutas en las escuelas.

El secreto del agricultor

Sin embargo, para garantizar que las frutas y verduras crezcan de forma saludable, es crucial prestar atención a lo que se aplica al suelo, particularmente si se tiene un huerto propio, una práctica muy común en Estados Unidos que también está ganando popularidad en Italia.

Hay un truco que puede multiplicar la cantidad de frutas y verduras y su crecimiento, y todo se basa en un ingrediente que se encuentra en nuestra nevera y que usamos para otros propósitos.

Nos referimos a la levadura de cerveza. Este producto introduce microorganismos en el suelo que se asientan dentro de las plantas, fortaleciendo su crecimiento gracias a la presencia de fósforo y nitrógeno.

Para elaborar un fertilizante con este ingrediente, simplemente hay que triturarlo o utilizar la versión en polvo en un vaso de agua a temperatura ambiente, añadiendo una cucharadita de azúcar.

Esta mezcla debe utilizarse para regar el jardín, y tras un tiempo, notaremos que la cosecha de frutas y verduras será abundante y podremos disfrutar de los productos sin inconvenientes.

Este es uno de los métodos que utilizan los agricultores para asegurar que los productos de sus tierras crezcan sin contratiempos y en gran cantidad.

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