7 maneras de hacer tu propio abono natural en casa

Quienes poseen un jardín o un área pequeña comprenden la relevancia de contar con plantas saludables y vibrantes.

Existen numerosos productos disponibles que pueden estimular su desarrollo. Sin embargo, en ocasiones, estos incluyen químicos que pueden ser perjudiciales.

Si deseas que tus plantas se mantengan en buen estado durante mucho tiempo, ¡hoy te compartimos 7 maneras de elaborar fertilizante natural en casa!

Introducción

Las plantas son seres vivos y, como tales, requieren ciertos nutrientes fundamentales para crecer y florecer.

Por ello, es crucial que estén en un ambiente de suelo nutritivo que les permita prosperar.

No necesitarás comprar nada, ¡solo reutilizar los restos de comida que tengas en tu cocina!

Cáscaras de huevo

El primer método que te sugerimos hoy son las cáscaras de huevo . Una verdadera solución para nuestras plantas que sufren por babosas y plagas.

Primero, asegúrate de lavar bien las cáscaras de huevo. Luego, tritúralas en pedazos pequeños con las manos. Después, introdúcelas en el suelo a una profundidad de al menos 5 cm, utilizando el mango de una cuchara de madera.

Esto también aportará al suelo una buena cantidad de carbonato, ideal para el cultivo de tomates.

Posos de café

Es difícil contar cuántos cafés se consumen en un día. Especialmente cuando hay visitas, siempre estamos ocupados preparando y limpiando la cafetera. Aunque pueda parecer tedioso, ¡mira el lado positivo: tendrás mucho más fertilizante gracias a los posos de café!

Es muy fácil de hacer, solo necesitas verter un par de cucharadas de posos de café en el suelo. Por supuesto, puedes usar más si el recipiente es grande.

Este método es especialmente recomendado para plantas florecientes como azaleas, rosas, rododendros, camelias y árboles de hoja perenne.

Cáscaras de plátano

Los plátanos y sus cáscaras son ricos en potasio, un nutriente esencial no solo para nosotros, sino también para nuestras queridas plantas.

Este ingrediente natural puede ser utilizado de diferentes maneras.

Si tienes poco tiempo, corta las cáscaras de plátano en trozos pequeños y colócalos en el suelo a una profundidad de aproximadamente dos centímetros. Puedes usar el mango de una cuchara de madera o tus dedos para ayudar.

Otra opción es preparar un macerado. Para ello, toma un frasco grande y añade un litro de agua junto con las cáscaras de plátano. Luego, déjalo reposar durante dos semanas.

Después de este tiempo, retira las cáscaras del frasco y vierte el líquido resultante en una botella con atomizador utilizando un embudo.

¡Tu fertilizante está listo para ser utilizado en tu jardín!

Agua de cocción

Las propiedades beneficiosas de las verduras son innumerables. Son ricas en potasio, magnesio, calcio y diversas vitaminas. Si antes pensabas en desechar el agua de la cocción, no lo hagas más, ¡porque es justo lo que necesitamos!

Vierte el agua de cocción en una regadera y riega todas tus plantas. Si no tienes una, puedes almacenar el líquido en una botella.

Asegúrate de que el agua esté fría antes de usarla.

Además, puedes emplear infusiones de hierbas como la manzanilla.

¡Atención! Es fundamental que las verduras sean orgánicas y no contengan químicos. De lo contrario, estos podrían transferirse al suelo y dañarlo.

Macerado de ortiga

Otra opción que podemos utilizar para enriquecer el suelo es el macerado de ortiga.

Solo necesitas remojar 250 g de ortiga en 5 litros de agua durante 4 horas. Si puedes, colócalo en una olla grande o en una palangana.

Después de ese tiempo, cuela la mezcla y vierte solo el líquido en una regadera.

Este fertilizante es excelente para prevenir enfermedades y fortalecer nuestras plantas.

Levadura

La levadura de cerveza no solo ayuda a que la masa crezca, ¡también favorece el crecimiento de los brotes!

Toma un cubo de levadura de cerveza y disuélvelo en 3 litros de agua. Puedes hacerlo en una olla o en una palangana.

Una vez preparado, viértelo en una regadera y comienza a regar.

De esta manera, el suelo se verá estimulado para producir una nueva y abundante floración.

Además, la cerveza puede ser un buen fertilizante si se usa con moderación.

Precauciones

Si después de probar estos consejos no observas mejoras, te recomendamos que contactes a un jardinero profesional.

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