No todos conocen que las cáscaras de naranja, junto con el vinagre, pueden ser bastante útiles para diversas tareas en el hogar. A continuación, te mostramos cómo.
En la temporada invernal, a la que nos estamos acercando, solemos consumir frutas de la estación y, entre ellas, los cítricos, siendo las naranjas un ejemplo destacado.
Estos frutos son característicos de los meses más fríos debido a su relevancia para nuestro sistema inmunológico, ya que, ante las heladas y bajas temperaturas, muchos de nosotros tendemos a enfermar.
Cáscaras de naranja: así se utilizan con vinagre
Para prevenir esto y reforzar nuestro sistema inmunológico, a menudo se recomienda complementar nuestra alimentación con vitamina C, que se encuentra en abundancia en las naranjas.
Por ello, muchos de nosotros solemos consumirlas tal cual o hacer un buen zumo, lo que nos proporciona un impulso de energía y ayuda a aliviar parcialmente nuestras molestias, brindando varios beneficios.
Aunque la mayoría elimina la cáscara, no debe ser desechada, ya que puede ser útil para algo que resulta indispensable en nuestros hogares y que no todos conocen.
Además, durante la navidad, las cáscaras de mandarinas y naranjas pueden ser utilizadas para adornar nuestro árbol o para realizar manualidades navideñas muy creativas.
Sin embargo, lo que vamos a compartir ahora es un uso completamente nuevo de estas cáscaras que solo algunas amas de casa conocen, ya que se combina con otro ingrediente especial.
la solución natural
Estamos hablando del vinagre. En efecto, al recuperar un frasco, podemos trocear las cáscaras de naranja y cubrirlas con vinagre hasta que queden completamente sumergidas.
Una vez añadido el vinagre, cerramos bien el frasco y dejamos reposar durante aproximadamente 15 días para que las cáscaras se maceren y liberen sus sustancias cítricas y aceites esenciales.
Transcurrido este tiempo, filtra la mezcla para eliminar los trozos de cáscara de naranja y vierte el líquido en una botella con spray para usarlo en superficies con suciedad difícil.
Notaremos que, gracias a la acción del vinagre y las propiedades de la naranja, muchas de esas superficies, incluyendo el acero, quedarán completamente limpias y se liberará un aroma muy agradable en el ambiente.
Este método puede aplicarse no solo con naranjas, sino también con otros tipos de cítricos, ya que tienen características similares, por lo que también se pueden usar limones o mandarinas.
Por supuesto, esto depende de nuestras preferencias, pero a partir de ahora, dado que la temporada lo permite, cuando disfrutemos de una naranja, podemos optar por probar esta solución que seguramente nos sorprenderá.
De este modo, no solo obtendremos un detergente natural que beneficiará nuestras superficies, sino que también ahorraremos algo de dinero al evitar la compra de productos comerciales de limpieza.