A todo el mundo le encantan las papas, y qué mejor manera de cultivarlas que sin químicos y en un buen sustrato. Incluso si no cuentas con un jardín, puedes crear un pequeño huerto en un contenedor, y esto no es solo para quienes tienen espacio limitado, como en áreas urbanas.
También puede ser ventajoso si deseas aumentar tu producción, ya que el entorno es más fácil de manejar.
Ventajas de cultivar papas en un barril:
Esto reduce la necesidad de desmalezar y minimiza la exposición a hongos y plagas.
Además, no correrás el riesgo de dañarlas al excavar para recogerlas.
¡Basta con volcar el barril!
Después de investigar sobre el cultivo en un barril, aquí están mis recomendaciones en solo cuatro pasos para lograrlo con éxito:
1. Selecciona y prepara un barril o contenedor
Elige un contenedor como un cubo de 200 litros o un medio barril.
Otra opción es utilizar cualquier recipiente que tenga un volumen similar.
La única condición es que el contenedor cuente con agujeros o que se le puedan hacer.
Luego, limpia el interior del recipiente con una solución de vinagre blanco para eliminar cualquier impureza.
Evita el uso de lejía , te recomiendo optar por alternativas naturales.
Un buen drenaje es crucial para mantener las papas en buen estado, por lo que deberás hacer varios agujeros grandes en la parte inferior y lateral de tu contenedor.
Otra opción es cortar la base del recipiente y colocarlo sobre un terreno que drene bien, como el suelo de tu jardín.
2. Escoge un tipo de papa y plántalas
Podrás encontrar diversas variedades de papas para plantar en viveros o en línea, en sitios especializados como este.
Para comenzar rápidamente: las plántulas deben estar germinadas. Puedes adquirir plántulas ya germinadas o hacerlas germinar tú mismo.
¿Cómo? Colocándolas en un cartón de huevos, con la parte más yema hacia arriba. Luego, sitúa la caja en un lugar cálido y luminoso. Otra opción es poner los tubérculos en una bolsa de papel abierta.
Ahora, llena el fondo de tu contenedor con aproximadamente 15 cm de una mezcla de tierra para plantar, que puedes encontrar en tu tienda de jardinería local, y compost (o estiércol).
Si es posible, utiliza una tierra para macetas que contenga fibras de coco para evitar que la tierra se compacte demasiado y retenga suficiente humedad para las raíces.
Sin embargo, ten en cuenta que las papas se adaptan a cualquier tipo de suelo.
A continuación, añade algunas plantas a esta primera capa de tierra, asegurándote de espaciar bien. Cubre las plantas con una segunda capa de 15 cm de tu mezcla de tierra para macetas y compost.
Cuidado con compactar demasiado la tierra, para que todo pueda respirar adecuadamente.
Agrega agua para humedecer el sustrato. Y sobre todo, recuerda mantener la tierra húmeda en todo momento, pero sin excederte para no asfixiar las plantas.
3. Añade más tierra
Cuando las plantas de papa midan entre 15 y 20 cm de altura, añade una tercera capa de tu mezcla de tierra para macetas y compost para cubrir 3/4 de los tallos y el follaje visible.
Repite este proceso, permitiendo que los tallos crezcan hacia la parte superior del barril, y cubriéndolos con tierra tan pronto como superen los 15 cm de altura.
Al mismo tiempo, no olvides regar bien la tierra a medida que las papas continúan creciendo.
4. Cosecha
Después de unas diez semanas, cuando el follaje de las plantas empiece a amarillear, estarán listas para la cosecha.
Revisa suavemente la capa superior de tierra en el barril con las manos para comprobar si están listas.
Si descubres que las papas están maduras, vacía el barril sobre una lona para revelar tu cosecha.
Después de tu primera recolección, recuerda reservar algunas para utilizarlas como plántulas al año siguiente.
Así que ahí lo tienes, podrás disfrutar de tus deliciosas papas, que tú mismo has cultivado.